¿Cuándo deberías preocuparte?
Estas son señales que no deben pasar desapercibidas:
- Respiración rápida y constante sin razón aparente.
- Jadeo como si fuera un perro.
- Sonidos al respirar como silbidos o ronquidos.
- Movimiento abdominal exagerado al inhalar.
- Encías azuladas o pálidas.
- Postura encorvada o con el cuello estirado como si buscara aire.
No lo mediques por tu cuenta. Ante cualquier cambio repentino o persistente, lo mejor es acudir a una consulta veterinaria.
Cómo cuidar la salud respiratoria de tu felino
Porque nutrir también es prevenir, aquí algunos consejos:
- Mantén su espacio ventilado y libre de humo, polvo o perfumes fuertes.
- Evita cambios bruscos de temperatura.
- Reduce el estrés: respeta sus rutinas y dale su propio rincón tranquilo.
- Visita al veterinario al menos una vez al año para chequeos generales.
- Refuerza su sistema inmune desde la nutrición: una alimentación como la de Nutriss Gatos, con ingredientes de alta calidad, ayuda a mantenerlo sano por dentro y por fuera.
Cat Lover, cuidar de tu felino no solo es alimentarlo bien, es observarlo, escucharlo y aprender a interpretar sus silencios. Su forma de respirar puede ser una señal sutil, pero poderosa, de lo que siente o necesita. Detectar a tiempo cualquier cambio, consultar a su veterinario y seguir fortaleciendo su bienestar diario, es también una forma de decirle: “Estoy contigo”.