Cambios hormonales comunes en perros

Etapa de cachorro a adulto

Durante la pubertad, los niveles de testosterona (en machos) y estrógenos (en hembras) aumentan. Esto puede generar comportamientos sexuales, marcaje, monta o mayor inquietud. Algunos perros pueden volverse más territoriales o reaccionar diferente a otros animales.

Celo en perras y comportamiento sexual en machos

Las perras en celo pueden mostrarse más cariñosas, ansiosas o sensibles. Los machos, al percibir feromonas, pueden intentar escapar, montar objetos o aullar. Es una etapa que suele repetirse cada 6-8 meses en hembras no esterilizadas.

Perros mayores y desequilibrio hormonal

Al envejecer, pueden aparecer enfermedades como el hipotiroidismo, que afectan el comportamiento. La falta de energía, tristeza o cambios en el apetito pueden tener causas hormonales. Un perro deprimido podría estar enfrentando un desajuste en su sistema endocrino.

Señales de que tu perro podría tener un desequilibrio hormonal

• Cambios bruscos en el comportamiento
• Aumento o pérdida de peso sin razón aparente
• Letargo o hiperactividad inusual
• Pérdida de pelo localizada
• Agresividad repentina
• Ansiedad o lamerse compulsivamente

Si notas varias de estas señales, consulta con tu veterinario para un diagnóstico. Solo un profesional puede determinar si el origen es hormonal.

¿Qué hacer frente a estos cambios hormonales?

Consulta veterinaria temprana

El primer paso es siempre acudir al veterinario para descartar o confirmar un desequilibrio hormonal. Podría requerirse un examen de sangre o pruebas específicas.

Esterilización responsable

Esterilizar a tu perro no solo evita camadas no deseadas, sino que también puede estabilizar ciertos comportamientos relacionados con el celo o la testosterona. Es una decisión que debes tomar con tu veterinario.

Apoyo desde la alimentación y el ambiente

Una buena nutrición ayuda a mantener su equilibrio hormonal y emocional. En Nutriss creemos que una alimentación adaptada a su etapa de vida puede hacer la diferencia. Además, mantener rutinas, ejercicio y espacios tranquilos contribuye a su estabilidad.